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jueves, 2 de junio de 2011

PEDAL SHIMANO PD M970

Hace ya dos años y medio que me los compré. No son los más ligeros, no son los más bonitos, no son los que mejor funcionan en barro... pero son, para mí, los mejores en conjunto. 

 Se instalan con una llave Allen de 8, se regula la dureza del muelle con una llave Allen de 3. Cuando enganchas la cala al pedal, un sonoro click te avisa. El cuerpo del pedal está rebajado para permitir la evacuación del barro. No he recorrido zonas con barro muy pegajoso (como la arcilla) y no he tenido problemas para liberar los pies.

Últimamente un ruidillo metálico me acompaña al pedalear, suena siempre en una posición fija, cuando la biela izquierda recorre desde las 2 a las 3. Desmonté los rodamientos del pedalier, limpié y engrasé a conciencia, además de reapretar las cazoletas y bielas; el ruido seguía. Marcos y yo intercambiamos bicis por si las calas o zapatillas eran las causantes y el ruido continbuaba. A primera vista, los pedales estaban bien, quizá uno hacía un pelín de ruido metálico al girar, señal de que no debía de tener demasiada grasa en su interior.
Ayer recorrí más de 60 kilómetros por el monte y el ruido fue a más, hasta que la cadena, seca, tapaba el ruidillo al rodar.

Hoy desmonté los pedales: se fijan a un tornillo de banco o con una mordaza, una llave de 17 para extraer el eje con el casquillo (A), de forma que tenemos el eje, el guardapolvo (D), el rodamiento y la tuerca-contratuerca.
En mi caso la grasa del rodamiento estaba casi intacta y éste no tenía juego (*), así que limpié bien el casquillo y el interior del cuerpo del pedal con desengrasante; añadí una generosa cantidad de grasa de calidad (Motorex, en este caso) y reinstalé el eje. A medida que se va enroscando el casquillo en el cuerpo, la grasa nueva empuja a la vieja hacia el exterior (cuidado con el guardapolvo, que no se dañe), y la retiramos con un paño, para que atraiga polvo o barro. Ya se nota cómo el pedal gira de forma distinta.

Además, aproveché para realizar la limpieza y el mantenimiento del exterior: de nuevo con desengrasante, limpieza del muelle y mecanismo de retención. Una vez limpio, con una allen de 3 apreté los tornillos (B) de la plataforma de apoyo y el eje del muelle (C).

Una gota de aceite denso (Finish Line Wet) en los extremos del muelle y listo.

Aunque la bici siga haciendo ruido, los pedales necesitaban un poco de mimo.

(*) En el supuesto de que el rodamiento tuviese holgura o estuviese muy sucio, hay que desmontarlo, con mucho cuidado, pues las 24 bolas que permiten el giro suave son muy pequeñas y es fácil perderlas. Para esta tarea viene muy bien un destornillador con la punta imantada y/o grasa, de forma que no se pierdan.

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